¿Quién nos salvará de ti?



Yo no sé a usted, ciudadano, ciudadana, pero a mí no me inspira confianza un tipo que se viste de esta manera para ir al trabajo. ¡Y lo que le gusta salir en los papeles! La penúltima: ante el nuevo gobierno clama ¡Santina, sálvanos y salva España!

Yo no sé si Covadonga le hará mucho caso, sobre todo porque la tienen metida en una cueva cuando ellos andan bien a techo en una basílica. Me imagino que también estará la mujer un poco harta de que la gente vaya a pedir bobadas. Por ejemplo, Oviedo y Sporting van a pedir ayuda para la cosa del balompié. Ya dice Ciriaco Cano que si no tiran a puerta más que una vez en todo el partido no pueden ganar; es como el del chiste, que le dice la Covi: “Sí, hombre, puedo pensar en ayudarte a que te toque la lotería, ¡pero, hombre, por lo menos compra el décimo!


El señor arzobispo cuando no anda por el mundo con esas pintas lleva  un collar con un crucifijo de oro y un anillo así de gordo, que cualquier día va a tener un disgusto. Entonces sí que saldrá en los papeles y no con esos artículos aburridos de cada jueves.

Que él piensa que no, que escribe bien; no es original ni en los títulos, ha sacado un libro sobre unas vacaciones que pasó en el continente negro y las llama “Mis memorias de África”. Luego, que disfruta el hombre viendo que chincha: “IU nunca me defrauda”, dice, como señalando que ha conseguido picarlos. Infantil, el señor arzobispo.

Máster matrimonial.

La Santa Madre Iglesia, velando por la cura de las almas, ha diseñado un curso de preparación matrimonial de tres años. No se exige aprobarlo para casarse, eso sí. Está la anciana institución preocupada por la cantidad de matrimonios que se rompen; a mí me preocupaba más cuando eran “indisolubles” y lo que se rompían los cónyuges eran los morros, de no aguantarse.

¿Qué se estudiará? Bueno, primero decir que es un método moderno, on-line, es decir, desde casa. “No se pueden formar los contrayentes en solamente 20 horas que duran los cursillos parroquiales”, así que tres añitos delante del ordenador, cuando vuelvan los prometidos a su casa después del trabajo, con ello sabrán valorar “la importancia del sexo y poner ambos de su parte para favorecer estos encuentros, evitando la pereza en la mujer o el poco cuidado en el varón”. ¡Instructivo, eh!

Pues hay más, incluso el periodista, sublimado en la emoción del momento, comete una errata como un templo: “El máster matrimonial de los obispos españoles aborta temas relacionados con…” (Dios le habrá perdonado, previa confesión y propósito de la enmienda) “…relacionados con la educación afectivo-sexual como las relaciones prematrimoniales, la masturbación, la infidelidad o las relaciones sexuales en el matrimonio”. (Por cierto, en el máster no se incluyen prácticas, eso debe arreglarse el alumnado por su cuenta).

Un poco tarde, parece.

Las últimas declaraciones de expertos dicen que los jóvenes cada vez se acercan más precozmente al sexo, que las relaciones físicas empiezan bien pronto y que el acceso fácil a Internet pone en su mano la pornografía. Por ende, se hace más preciso que nunca empezar esa educación afectiva en la escuela. La gente se está casando en torno a la edad de 30 años, ¿hay que aplazar la formación hasta entonces?

Para la Iglesia, no nos olvidemos, el sexo está marcado en el sexto, como pecado. Incluso
El Señor Arzobispo en traje y anillo de calle.
Arriba en traje de faena. (Fotos LNE)
como vicio nefando ciertas prácticas, que llevan implícito el fuego eterno, de manera que se opone y se opondrá per sécula seculorum a que ese tema se toque en las aulas. A que ese tema se toque, vaya; en general. Salvo que alguno de sus miembros tenga a bien abordarlo en la sacristía.

Este verano se ha dado la curiosa circunstancia de que en la misma semana las responsables del programa Skolae, -proyecto de co-educación para la enseñanza navarra-, eran propuestas por la UNESCO para un premio mundial por su magnífica labor y a la par entraban ante el Tribunal Superior de Justicia de Navarra propuestas para unos añitos de cárcel.

Amenazadas (y premiadas).

La campaña contra el equipo de Skolae fue larga y dura; todas las fuerzas conservadoras navarras y estatales se concertaron contra el proyecto, llegando a decir barbaridades como que era un colectivo de pederastas o que eran militantes de Bildu (declaraciones de Unión del Pueblo Navarro, partido socio del PP). La cúspide del acoso fue una denuncia judicial contra cinco redactoras y cinco tutoras, encabezadas por la gijonesa de Ablaña Marian Moreno, que lleva toda la vida empeñada en una enseñanza en igualdad. Los cargos fueron presentados por la Confederación Nacional de Padres de Familia y Padres de Alumnos (Concapa) y por “algunos padres y madres del Colegio San Cernín”.

La UNESCO concedió el premio al proyecto que fue entregado con gran pompa en París. Diario de Navarra: La Unesco, organización de Naciones Unidas dedicada a la Educación, valora del proyecto Skolae las herramientas que facilita a niños y niñas para “ejercer su derecho individual a la igualdad, independientemente de su cultura, religión, orientación o identidad sexual". Esta entidad también resalta su "carácter preventivo" de "toda forma de violencia contra las niñas y las mujeres, poniendo de relieve a las mujeres y sus contribuciones, y valorizando la masculinidad igualitaria y la feminidad responsable" (Luego, a recoger el galardón, fue la presidenta de la Comunidad, María Chivite, pero esa es otra historia)

Perfil de los denunciantes.

El asunto no nos queda tan lejos, Navarra está ahí, al lado; y no solamente la figura de Marian Moreno nos acerca en lo positivo; en lo negativo debemos tener en cuenta que en el pequeño parlamente astur ya ha salido un elemento, militante del partido altavox del PP que se ha atrevido a decir que “los programas de educación sexual alarman a las familias”. No es eso lo que se oye en los consejos escolares. Aunque esta gente es capaz de afirmar que la Tierra es plana, cuando les conviene; el señor Ignacio Blanco, sin venir a cuento, ha afirmado desde la misma tribuna “La mayoría de los delitos sexuales los cometen inmigrantes, y eso se oculta”. No es lo que cuentan las estadísticas policiales de Asturias.

El Colegio San Cernín es un centro concertado con la Comunidad Foral de Navarra, gestionado por una cooperativa, que parte de un asentamiento en 1974 de monjas francesas “en un pequeño chalet”. Dedicado en principio solamente a niñas, ahora es mixto y ha ido creciendo sobre dos bases: “Uno de estos rasgos, el bilingüismo, es punto clave en la filosofía de San Cernín. Otro pilar básico es la formación religiosa” (San Cernín 50 años, publicación conmemorativa).

En la actualidad advierten “prestamos especial atención al proceso de admisión del nuevo alumnado”, para que no haya malos entendidos. Tienen lógicamente actividades extraescolares, que incluyen, por ejemplo, una escuela de música, donde se puede formar el alumnado con cuotas entre 40 y 110 €/mes. Existe una Escuela de padres y madres “con cinco grupos de trabajo” (página web) entre los que no está la educación afectivo-sexual; luego veremos por qué. Sus instalaciones están construidas sobre terrenos públicos cedidos “por un periodo de 50 años, ampliable a 99” y mediante subvenciones para los edificios.

La CONCAPA se autodefine como católica y suele verse en todos los frentes de pelea por mayores ventajas para la enseñanza religiosa. El día 9 de enero hizo pública su preocupación por “el gobierno progresista”; a esta asociación, como al señor arzobispo, no le gusta, se cree amenazada por él. Capacidad profética, se llama esa figura, si tenemos en cuenta que el gobierno ni siquiera  existe cuando se escriben estas líneas. (Es de esperar que lo habrá).

En los dos folios de preocupación intensa declaran, -de ahí lo que señalábamos en el San Cernín-, que, en términos de la educación afectivo sexual “corresponde al ámbito familiar el desarrollo de la misma, según las creencias las familias”. Un ejemplo de aperturismo y de respeto a las diferentes opiniones, parece; sin embargo, enseguida se les ve el plumero: La religión no pertenece al ámbito privado, esa es asignatura obligatoria y evaluable.

Su reino tiene mucho que ver con este mundo.

El negocio de la cura de almas es próspero, estable; sin reclamaciones, en definitiva promete la vida eterna de la que no hay noticias de primera mano. Para asegurarse los ingresos es menester una clientela fiel, y eso se consigue con una formación de acuerdo con sus dogmas.

Para no despilfarrar en gastos, es recomendable no pagar impuestos. El señor arzobispo de Oviedo se queja de la cansina letanía (él, más moderno, dice ”mantra”) de aquellos que reclamamos que paguen impuestos como si fueran personas normales. Dice que su empresa colabora al bien común y por ello debe estar exenta del IBI. No dan puntada sin hilo. ¿Quién nos librará de ellos? Empiezan clamando a la Santina y terminan reclamando a la Autoridad Tributaria, porque, al fin y a la postre, polvus sunt.

M. A. Fernández
10 enero 2020


Comentarios

Entradas populares de este blog

La famosa leyenda del Oso que mató a Favila

X Fiesta del Oso Regicida

UN ALEGATO A LA REPÚBLICA